Hace dos semanas me pasó algo insólito.
Soy una controladora nata, que quede claro. Como decía, hace dos semanas llegué a casa y no quería pensar en nada. No quería saber nada del IELTS, del visado, de mi nuevo trabajo, de mis amigos, de cómo echo de menos a mis amigos, de mi familia, de cómo echo de menos a mi familia, de la maravillosa luz de Perth, de la soledad, de este blog, del inglés como mi segunda lengua, de mi teoría del vómito, de las celebraciones a las que he sido invitada, del ejercicio que debería hacer pero que no hago, de ser consciente de que soy humana, de la gente que me quita energía.
Llegué a casa y quería meterme en una burbuja. Todavía estoy dentro.
Bubbles
Two weeks ago something extraordinary happened to me.
I am a natural controller and, as I was saying, two weeks ago I got home and I didn’t want to think about anything. I didn’t want to think about the IELTS, our visa stuff, the new job, my friends, how I miss my friends, my family, how I miss my family, the awesome light of Perth, the loneliness, this blog, the English as a second language, me vomiting, the events I have been invited to, that I should go to the gym and I am not going, me not being perfect,the people who drain me.
I got home and I desired to be in a bubble. I’m still there.